NO ME TOMEN POR LOCO

Si van en un avión y a su lado viaja un joven de unos 30 años (¡aunque de apariencia mucho más joven!) solo, con un libro abierto entre las manos y carcajeándose de vez en cuando, no lo tomen por loco.

Puede que ese joven haya estado a punto de un ataque de nervios por culpa del servicio ferroviario italiano cuyo funcionamiento y administración se asemeja al del mismo gobierno que lo regenta. Puede que haya tenido que compartir un taxi con un oriundo pegado al móvil para no pagar el total de 55€ del trayecto desde el centro de Roma hasta el aeropuerto Leonardo da Vinci. Incluso puede que la sonrisa de la Gioconda se deba al “cachondeo” de ésta al ver a ese joven perdido entre terminales buscando una puerta de embarque inexistente. Imagínense también que ese mismo joven se dedique al arte dramático y que al día siguiente tenga una actuación importante (¿cuál de ellas no lo es?) y que tenga que llegar a Valencia a tiempo sí o sí. Es posible que un ex policía grasiento, reconvertido en guardia de seguridad, le haya manipulado los testículos (literalmente) y que, llegando a la dichosa D-07 GATE a 5 minutos de la salida del avión de la compañía Vueling, se haya dado cuenta que hay un “delayed” de 2 horas 30 minutos. Puede que el pobre jovenzuelo experimente una mezcla de cansancio, post estrés, falta de nicotina en su organismo y hambre, mucha hambre: síntomas más conocidos por el nombre vulgar de “burrera galopante”.

Y si se fija usted bien en el libro anteriormente citado puede que sea El misterio de la cripta embrujada de Eduardo Mendoza.

Así que, si ven a joven solo, de unos 30 años (¡aunque de apariencia mucho más joven!) riéndose con un libro entre las manos: por favor, no lo tomen por loco.




Una adaptación dramática del libro.Para mi gusto chillan mucho...